18 enero 2007

quiero volver a oler el mar

Clic! Encén la llum de la tauleta de nit. És una llum de color daurat. Te dues bombetes. Una d’elles normal i corrent, de les que es rosquen amb la ma i es fonen mentre estàs llegint les últimes pàgines d’una dels capítols més interessants del llibre. L’altre, en canvi, esta recoberta i és més petita, de tal manera que només deixa sortir uns petits rajos de llum que projecten una ombra tènue a la paret. Mai encerta a la primera quina de les dues llums vol encendre. Avui la petita. No te ganes de llegir ni de observar. Finalment i després de molts dies, se sent realitzada. Segueix sent mediocre, però se sent realitza. ....................................................................................................
Qué sería de la humanidad sin corazón, sin sentimiento, sin pasión. La belleza tan solo es algo que se percibe a través del olor y las caricias son 19 copas de champán francés dispuestas a brindar por ti. A veces pienso que tal vez sería mejor volver a aquellas escaleras dónde un día creí volar. Esta vez sola, o quizá contigo. Tengo un rato para pensar en cómo seria mi vida si no soñara tan a menudo y un ratito para concluir que no valdría nada. Nada de nada, ni de ti ni de mí. Se me pasa cierta canción por la cabeza. Vuelvo a revolver las paredes mi consciencia y descubro que tengo tanto por hacer, tanto por cambiar, tanto por resolver. Creo que hoy podría haber tenido un mar de flores, pero me quedé solo con mis sueños. Debería dejar de pensar lo que digo. …………………………………………………………………………………………….....................................
Últimamente soy especialista en cambiar mis estados de ánimo. Quiero volver a oler el mar.